Para muchos, Star Wars o “La Guerra de las Galaxias” ha sido la gran saga que ha acompañado nuestras vidas, desde aquel lejano 1977 hasta hoy, cuando a pocos meses tendremos el estreno de la 9ª cinta de la historia central. Si bien, pronto sabremos cómo terminará la historia de los Skywalker, sabemos cómo comenzó… aunque tal vez no sepamos tanto de cuanto fue lo que realmente costó para dar a luz a la franquicia más famosa del planeta. Por eso, en estas letras vamos a repasar la secreta historia de cómo realmente comenzó el cuento del granjero espacial que salvaría a toda una galaxia.
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En una historia muy, muy lejana…
El director de cine George Lucas tenía poco más de 25 años cuando estrenó su primer largometraje: THX 1138, una fantasía distópica con la cual se acercaba a la ciencia ficción de manera muy tímida. Por aquel entonces, soñaba con llevar al cine las aventuras de Flash Gordon, el héroe de cómics que fuera creado en los años 30 por Alex Raymond. Al director lo apasionaba ese universo tanto como para querer hacer una película con él, pero pronto descubrió que los derechos para llevar al personaje a la pantalla grande eran demasiado caros para un modesto director como él, y decidió entonces que debía construir su propio universo de ciencia ficción.
Lucas quería hacer de ésta una película para niños que introdujera algo así como una moral básica: esto es bueno y esto es malo. Luego del estrenar de American Grafitti en 1973 el realizador escribió un primer borrador del guion que tan sólo tenía trece páginas.
Además de agregar elementos del mencionado Flash Gordon, al director le gustaba particularmente una película de Akira Kurosawa: La fortaleza escondida, un relato de aventuras que a la postre guarda muchísimas similitudes con “Star Wars”. Con sólo ver la imagen inicial de aquel film basta para entender hasta qué punto Lucas veneraba la cinta de Kurosawa.
En los primeros bocetos de su saga, Lucas había ideado una ficción que comenzaba en el siglo XXXIII, en el cual un veterano de guerra llamado Luke Skywalker se ponía al frente de una misión para rescatar a su amigo Kane Starkiller. Kane tenía un hijo llamado Annikin, que luego sería entrenado por Luke y con el que debería hacer equipo para rescatar a una princesa. En el medio aparecía Han Solo, una criatura verde que ayudaba a los protagonistas en su misión.
Ni su agente, ni su abogado le veían sentido al borrador, pero Lucas era su cliente y salieron al mercado a venderlo.
Entonces, poco a poco el director empezó a hacer cambios para hacer más atractiva la historia, descartando ideas, aunque algunas después tendrían una segunda vuelta:
• Luke sería una mujer guerrera, con el fin de para aumentar la presencia femenina (algo que sucedió con Rei muchísimos años después).
• R2D2 hablara en inglés y dijera groserías. Incluso se grabaron algunos diálogos que al final se descartaron.
• Leia tuviera poderes especiales. (Leia “Poppins” del Episodio 8)
• Se descartó el nombre Starkiller por la similitud que podía tener con los crímenes del clan Manson y el homicidio de Sharon Tate ocurridos a fines de los 60’s.
• Han Solo era un marciano verde y alto.
Cuando United Artist y Universal rechazaron el primer boceto, Lucas decidió dedicarle un año completo a la escritura del guion. Cuando terminó, tenía en sus manos un monstruo de doscientas páginas que evidentemente nadie iba a financiar. Por ese motivo decidió separarlo en tres partes y concentrarse en escribir el guion para filmar la primera.
Al poco tiempo la productora Fox decidió dar el gran paso y aprobó la filmación del largometraje. Lucas fue muy inteligente en la negociación ya que insistió en tener los derechos de la música y, además, los derechos de las posibles continuaciones. Con la misma insistencia reclamó los derechos del ‘merchandising’. Hasta ‘Star Wars’, la comercialización de productos relacionados con la película era una fuente de ingresos menor para los estudios, pero la odisea espacial lo cambió todo. «Voy a ganar cinco veces más que Francis Coppola con estos juguetes. Y no tendré que hacer ‘El Padrino'», dijo Lucas.
Una vez firmó con la Fox, Lucas dedicó dos años y medio escribiendo el guion en una habitación de su casa en la que un retrato de Einstein lo observaba desde la pared. Sufrió dolores de cabeza, pecho y estómago. Se obsesionó. Solo podía utilizar un determinado tipo de lápices y de papel. Se cortaba mechones de pelo y los tiraba a la papelera.
El tercer borrador estuvo listo en agosto de 1975. Se inspiró en su amigo Francis Ford Coppola para el personaje de Han Solo, que era el más listo de la galaxia, pero tenía una veta arrogante y autodestructiva.
Cuando el proyecto era un embrión, en la Comic Con de San Diego de 1975 por primera vez aparecía el logo de Star Wars en algunas remeras como forma primigenia de promoción.
Dejamos hasta este punto esta poco conocida historia, la cual retomaremos en el siguiente artículo. ¡Te esperamos! También te podría interesar: Valerian y la Ciudad de los Mil PlanetasY si quieres suscribirte al Podcast sólo toca este Enlace que te llevará a tu APP favorita para que puedas suscríbete, ¡te esperamos!
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